DOMINGO DE RESURRECCIÓN: EL SUDARIO

12 abril 2020

María Magdalena va al sepulcro de Jesús. 
Lo encuentra abierto y vacío. 
Corre a avisar a los apóstoles. 
Pedro y Juan corren a ver. 
Juan llega primero, se asoma, ve las vendas, 
pero no entra; espera a que llegue Pedro.

(Esto muestra que Pedro 
es considerado el apóstol principal, 
pues como tal lo había designado Jesús.)

Llega Pedro. Entra en el sepulcro. 
Ve las la sábana en el suelo. 
Pero el sudario, el paño que cubría la cara de Jesús,
no estaba en el suelo. 
Estaba aparte y doblado.

Sabemos que el cuerpo no se lo llevó nadie. 
Que Jesús resucitó. 

Con la sábana, 
no se ocupó de doblarla y dejarla en su puesto. 
Pero con el sudario sí. 

Alguna razón tuvo. 
¿Cuál?

La Biblia no dice. Pero la usanza judía, sí.

Cuando el jefe de la casa comía, 
se limpiaba con una servilleta de tela.

Si la dejaba sin doblar, quería decir: 
"He terminado".
Si la dejaba doblada al lado del plato quería decir:
"No he terminado. Volveré". 







Juan 20, 1-7
https://es.aleteia.org/2017/11/10/por-que-jesus-doblo-el-lienzo-que-cubria-su-faz-en-el-sepulcro/