3 marzo 2021
Como toda alegoría, ésta tiene enseñanza.
Una señora no católica hablando de religión con un médico católico.
— Doctor, si yo llegara a su consultorio y su secretaria me dijera que usted no está, pero que su señora madre sí está, ¿cree usted que yo iba a pedir que ella me atendiera?
— No, claro. Ella no es médica.
— Exacto. Quien murió en la cruz por mí fue Cristo, no María.
— Cierto. Pero suponga esto: usted llega a mi consultorio. Encuentra a mi madre en la recepción. Yo atiendo a mis pacientes con todo profesionalismo. Pero mi madre me cuenta que usted es una amiga cariñosa con ella, y por lo tanto me pide que la trate con más consideración. ¿Cree usted que no cuenta eso a favor en la atención que yo le dedique? Recuerde que eso contó en las bodas de Caná, a donde, no cabe duda, la Virgen fue invitada por puro aprecio. Y contó tanto para Jesús que adelantó la hora de revelar su poder de hacer milagros.
jesus/ http://www.alianzajm.org/Maria-Madre-de-la-Iglesia.html#.YEBJvGhKjIU
juan 2,4