domingo, 18 de marzo de 2012
CRISTIANOFOBIA
El pintor y escultor colombiano Fernando Botero elaboró unas pinturas, basadas en fotos,
que muestran las torturas perpetradas
por soldados de EEUU contra presos iraquíes.
Es una denuncia justa,
pese a que resulta muy probable
que esos prisioneros estuvieran detenidos
por crímenes cometidos.
Las pinturas le han dado la vuelta al mundo
y han sido aclamadas por el público en general,
que se muestra razonablemente indignado
por los abusos y atropellos
exhibidos en dichas obras de arte.
Pero, ni el maestro Botero, ni ningún otro artista,
ha denunciado en sus obras
los frecuentes, discriminatorios, mortales, sangrientos y destructivos ataques
que autoridades, fanáticos y terroristas islámicos dirigen en sus países contra los cristianos
sólo por el "gravísimo delito" de ser cristianos.
Y el resto del mundo también guarda silencio.
Así es la justicia de los intelectualoides.